martes, 7 de septiembre de 2010

Aquí te espero

Aquí te espero como cada día desde que nos conocimos
y mientras espero me acompaño con una copa de vino
que jamás se vacía.
Contengo mi respirar con cada sorbo para degustar su
sabor aquel que tu me enseñastes y a encontrar en cada
variedad que voy tomando la suavidad que me invoca tu piel.
Bebo y hecho a volar mi frágil imaginación, y pienso que
existirá nuevamente un nuevo reencuentro entre los dos,
y hemos pactado no decirnos nada, será un juego al cual
ya hemos apostado por ahora el tiempo pareciera detenerse
en la tranquilidad de la noche tibia agradable como
anticipándose a la calidez de la primavera que en pocos
días hará su arribo ya los árboles comienzan a despertar
de un largo pero a laves tan rápido letargo que pareciera
que no hubiese pasado.
El vino me sumerge en este sensacional laberinto de emociones,
al hacerte presente haremos como si fuera la primera ves
que tu y yo nos encontramos y allí nuevamente seré ignorante
de tus sentimientos y menos querré saber de tu pasado si con
ello significara que tengas que derramar algunas lagrimas,
respetare tus silencios al igual que tu haces con los míos,
yo te contare de mis sueños y viajes por el infinito para lograr
llevarte conmigo cuando tu así lo quieras.
No se cuantos años más podemos estar enamorados pero
si miramos atrás vemos que han pasado muchos donde
nuestros corazones no supieron lo que era el amor pues muchas
veces nos encontrábamos amando un imposible, de las tristezas mejor
no recordar, ahora solo me basta esperarte como tantas
noches en que he esperado sin encontrarte me acompaña una
botella de vino el que bebo a sorbos tratando de que mientras
me dure siempre habrá la esperanza de que tu llegues
bebo y de ves en cuando un cigarrillo tiendo a encender pero
hago mas que el intento porque al final queda ahí guardado
para otra ocasión.la primera noche solo seremos amigos o amantes ?
Aunque se que no podré contenerme y te besaré de inmediato
donde hallare la dulzura de tus labios contrastando con el sabor
que llevo en mi boca de aquel vino melancólico.
Tus dedos dibujaran la comisura de mis labios cerciorándose que
están humedecidos, entonces me abrazarás al igual que yo a ti
y muy despacio nos amaremos cerrando los ojos y nos quedaremos
así por un largo rato, hasta sentirnos tan solo uno, que nuestras
respiraciones se unirán en un solo suspiro.
Ahora vuelvo a mi realidad y sigo bebiendo despacio sin apuros,
la noche es joven aun y quedan unas cuantas horas para seguir
imaginándote hasta que el sueño se apodere de mi.
Bebo mi último sorbo y mañana será otro día no beberé pues solo
lo hago cuando la ocasión lo amerita y hoy si era imprescindible beber
pues es sabido que entre copa y copa tu te me apareces para
acompañarme y en un vuelo imaginario beberemos hasta el amanecer
sin temor a emborracharnos pues nosotros ya estamos embriagados
desde aquel día en que tu y yo nos besamos por primera vez ese día
bebimos del amor y ahora todo cuanto bebamos solo será beber más
y mas de aquel elixir que se llama amor.

No hay comentarios.: