No necesito que estés a mi lado para
poder imaginar
la suavidad de tus manos o el tono de tu voz
tan solo me pongo a pensar que sabor tienen tus labios
y el mundo se rinde a mis pies, cuando a la luz de la luna
y las estrellas comienzan a brillar tu te haces presente
en mis sueños y veo aquel ángel que me regala su compañía.
No necesito mirarte a los ojos para decirte que te quiero
que eres la razón por la cual tu me haces feliz.
No necesito alas para estar junto a ti, pues de tan solo
imaginar que tú me piensas ya estoy a tu lado
sabiendo que soy el único que te da tranquilidad,
la noche el silencio y la complicidad de tu palabras
me hacen dar gracias a la vida por la grandeza de tu corazón,donde tengo la confianza que puedo tenerte en mis brazos cada vez que mi corazón grita tu nombre, de saber que me haces tuyo y nos damos licencia para que volemos
la suavidad de tus manos o el tono de tu voz
tan solo me pongo a pensar que sabor tienen tus labios
y el mundo se rinde a mis pies, cuando a la luz de la luna
y las estrellas comienzan a brillar tu te haces presente
en mis sueños y veo aquel ángel que me regala su compañía.
No necesito mirarte a los ojos para decirte que te quiero
que eres la razón por la cual tu me haces feliz.
No necesito alas para estar junto a ti, pues de tan solo
imaginar que tú me piensas ya estoy a tu lado
sabiendo que soy el único que te da tranquilidad,
la noche el silencio y la complicidad de tu palabras
me hacen dar gracias a la vida por la grandeza de tu corazón,donde tengo la confianza que puedo tenerte en mis brazos cada vez que mi corazón grita tu nombre, de saber que me haces tuyo y nos damos licencia para que volemos
envueltos en esta magia que nuestro amor nos regala
al compás de la música entre besos y caricias que te harán
dormir,
apoyando tu cabeza en mi pecho esperando
el canto de las aves al amanecer, nos quedamos rendidos
luego de fundirnos en una pasión tierna y delicada.
No necesito soñar para saber que anoche fui tuyo
No necesito soñar para saber que anoche fui tuyo
que fuiste mía pues aún llevo impregnado en mi cuerpo
el perfume de
tu piel ese que te hace ser la mujer únicay que me hizo gritarle al mundo que un ángel había
llegado cuando de la nada ella tocó mi corazón.
2 julio 2015 12:34 Hrs.
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